viernes, 15 de abril de 2011
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miércoles, 13 de abril de 2011
CONTROLOGÍA
La Contrología
Artículo que recoge los Beneficios del Método Pilates Publicación y presentación del libro de Gloria Contreras |
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Respiración |
Columna vertebral |
De un modo u otro esta estructura, a la que también se nombra como "espina dorsal", interviene en las actividades importantes de los animales vertebrados, la columna vertebral de los seres humanos está compuesta por 26 vértebras, las cuales quedan separadas por cartílagos intervertebertebrales. Estos cartílagos proporcionan flexibilidad a la espina dorsal, por que ía fricción entre las vértebras se reduce. La contrología considera que la edad física no depende tanto de la edad, como de la flexibilidad de la columna. Es posible que una persona esté acabada a los 30 años, si su espalda se ha endurecido; en cambio, si a los 60 años de edad la columna vertebral se conserva flexible, se es joven. A causa de la mala postura, la mayoría de las personas sufren deformaciones en la columna, las que afortunadamente pueden corregirse por medios diversos, uno de los cuales consiste en practicar la contrología, por el que se readquiere la flexibilidad natural. Podemos decir que con los ejercicios destinados para la espina dorsal se imita el movimiento característico de los gusanos. Lo ideal es sentir cada hueso: las vértebras cervicales, las dorsales, las lumbares y el coxis. Esta es la mejor manera para "engrasar" las vértebras. Al extender y contraer el cuerpo, la espalda no tiene porque golpearse, pues se posa en el piso como una rueda. |
Consejos para practicar la contrología |
No hace falta comprar aparatos ni emplearlos en un gimnasio para el aprendizaje de la "contrología". Basta una superficie blanda no mayor de dos metros (conviene usar una colchoneta delgada, la que no deberá ser tan mullida como el colchón que suele emplearse para dormir). Es importante realizar los ejercicios en forma paciente y con constancia. Las diversas partes del cuerpo se moverán solas y en forma independiente, de modo que las partes restantes se mantengan relajadas. La libertad de los miembros se obtiene mediante la firmeza y el control de la parte central del cuerpo. En otras palabras, la soltura de brazos y piernas se debe a la estabilidad del abdomen y del tórax. Es frecuente realizar esfuerzos inútiles cuando se hace ejercicio, como el tensar los músculos del cuello y la cara, lo que desde luego deberá evitarse. La fuerza para la práctica de la contrología emanará únicamente de la región pélvica, la que abarca el abdomen, el recto, los glúteos y los órganos genitales. Recordando la observación sobre el movimiento de los felinos, debe señalarse que los gatos -ya sea sentados, recostados, caminando o sal-íando- muestran una belleza especial que en mucho se debe a Ja tensión y relajación constantes de estos animales. Hay personas que para hacer ejercicio ponen en tensión constante todos sus músculos, cansando innecesariamente su organismo, reduciendo su flexibilidad y exponiéndolo a lesiones. No debemos olvidar que tensión y relajación se interre-lacionan continuamente y que se logran mejores resultados si se trabaja con suavidad y soltura. Si deseamos desarrollarnos física y mentalmente, necesitamos disciplina y concentración. Nota: http://www.tcunam.org/tcunam/bienvenida.cfm?contenedor=3&opcion=4 |
Ingrid Audirac |
martes, 7 de diciembre de 2010
martes, 13 de abril de 2010
CLASES DE PILATES "EL YOGA OCCIDENTAL"
Powerhouse” o "Mansión del poder", es decir, a la musculatura del tronco, principalmente a los abdominales, paraespinales y glúteos. Pilates desarrolló más de 300 ejercicios con sus variantes. Está basado en un programa muy seguro de ejercicios lentos y controlados, en los que se busca la precisión de los ejercicios en pocas repeticiones y en los que cada movimiento está diseñado para ejercitar cada músculo en su máxima extensión. El Método Pilates lo puede practicar todo el mundo: jóvenes, mayores, personas que realizan algún otro deporte o las que llevan una vida más sedentaria. La única premisa es encontrar un centro donde se imparta y un monitor experto. Informes Miriam Rivera 0445537212140 * Clases a Domicilio * Grupos al aire libre en el Parque Viveros de Coyoacán Calle Progreso ENTRE LOS ACCESOS 1 Y 5 En el Interior del Parque: Calle Fresnos * 9am a 10am * 11am a 12pm * De Martes a Domingo También es recomendable para personas que se encuentran en proceso de rehabilitación o que han sufrido una lesión. De hecho, muchos fisioterapeutas aplican ésta técnica, en combinación con otras, para tratar a sus pacientes. Quienes pueden ser esas personas:
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miércoles, 7 de abril de 2010
La Educación y el Significado de la Vida
La educación tradicional hace sumamente difícil el pensar independiente. El conformismo conduce a la mediocridad. Ser diferente del grupo o resistirse al ambiente no es cosa fácil, y a menudo es arriesgado, en tanto rindamos culto al éxito. El deseo de obtener éxito en la vida, que es perseguir una recompensa, ya sea en lo material o en el así llamado mundo espiritual, la búsqueda de seguridad interna o externa, el anhelo de comodidad, todo este proceso ahoga el descontento, pone fin a la espontaneidad y engendra temor; y el temor bloquea la inteligente comprensión de la vida. A medida que envejecemos, la mente se embota y se insensibiliza el corazón.
En la búsqueda de comodidad generalmente nos refugiamos en un rincón de la vida, donde haya el menor conflicto posible, y salir de este aislamiento nos asusta. Este miedo a la vida, este temor a la lucha y a las nuevas experiencias, mata en nosotros el espíritu de aventura. El sistema donde crecemos y nos educamos nos hace temer ser diferentes de nuestro vecino, o pensar de forma opuesta a la norma establecida por la sociedad, que equivocadamente venera la autoridad y la tradición.
Por fortuna hay algunas personas serias, dispuestas a examinar nuestros problemas humanos, sin prejuicios ni de la derecha ni de la izquierda. Pero en la gran mayoría no existe el espíritu de descontento ni de rebeldía. Cuando sin comprensión cedemos ante las circunstancias del entorno, el espíritu de rebeldía que pudiéramos haber tenido, desaparece y nuestras responsabilidades pronto le ponen fin.
Rebeldía Necesaria
La rebeldía es dos clases: la violenta, que es meramente reaccionar, sin entendimiento, contra el orden establecido, y la rebeldía profundamente psicológica de la inteligencia. Hay muchos que se rebelan contra la ortodoxia establecida sólo para caer en otras ortodoxias, en otras ilusiones y en ocultas indulgencias para consigo mismos. Lo que generalmente sucede es que nos separamos de un grupo o un conjunto de ideales y nos identificamos con otros grupos y otros ideales, creando así una nueva norma de pensamiento, contra la cual tendremos que rebelarnos más adelante. La reacción sólo produce oposición y la reforma necesita reformas ulteriores.
Pero hay una rebeldía inteligente que no es reacción y que viene con el conocimiento propio, al darnos cuenta de nuestros propios pensamientos y sentimientos. Es sólo cuando nos enfrentamos con la experiencia tal como se presenta, sin evitar lo que nos perturba, que mantenemos alerta nuestra inteligencia. La inteligencia sumamente despierta es intuición, y es la única verdadera guía de la vida.
Significado de la Vida
Ahora bien, ¿cuál es el significado de la vida? ¿Para qué vivimos y luchamos? Si nos educamos simplemente para conseguir honores, alcanzar una buena posición o ser más eficientes, tener un mayor dominio sobre los demás, nuestras vidas estarán vacías y carecerán de profundidad. Si nos educamos para ser meros científicos, eruditos casados con los libros, o especialistas adictos a los conocimientos, estaremos contribuyendo a la destrucción y a la desdicha del mundo.
Aunque la vida tenga un sentido más alto y noble, ¿qué valor tiene la educación si jamás lo descubrimos? Podemos ser muy instruidos, pero si no tenemos una profunda integración entre pensamiento y sentimiento, nuestras vidas resultan incompletas, contradictorias y atormentadas por innumerables temores. Mientras la educación no cultive una visión integral de la vida, tiene muy poco significado.
En nuestra civilización actual hemos dividido la vida en tantos compartimentos que la educación tiene muy poco sentido, excepto cuando aprendemos una profesión o una técnica determinada. En vez de despertar la inteligencia integral del individuo, la educación lo estimula para que se adapte a un patrón, y, por lo tanto, le impide la comprensión de sí mismo como un proceso total. Intentar resolver los múltiples problemas de la vida en sus respectivos niveles, separados como están en diversas categorías, indica una absoluta falta de comprensión.
Integración
El individuo se compone de diferentes entidades, pero acentuar esas diferencias y estimular el desarrollo de un tipo definido, conduce a muchas complejidades y contradicciones. La educación debe efectuar la integración de estas entidades separadas, porque sin integración la vida se convierte en una serie de conflictos y sufrimientos. ¿De qué vale que nos hagamos abogados, si perpetuamos los litigios? ¿De qué sirve el conocimiento, si continuamos en la confusión? ¿De qué valen las habilidades técnicas e industriales si las usamos para destruirnos? ¿Cuál es el sentido de la existencia si nos ha de llevar a la violencia y a la completa desdicha? Aunque tengamos dinero o podamos ganarlo, aunque disfrutemos de nuestros placeres y tengamos nuestras organizaciones religiosas, estamos en conflicto permanente.
Debemos distinguir entre lo personal y lo individual. Lo personal es accidental; y entiendo por accidental las circunstancias de nacimiento, el ambiente en que nos hemos criado, con su nacionalismo, supersticiones, diferencias de clase y prejuicios. Lo personal o accidental es sólo momentáneo, aunque ese momento dure toda una vida. Y puesto que los actuales sistemas educativos están basados en lo personal, accidental o momentáneo, como resultado distorsionan el pensamiento e inculcan temores autodefensivos.
Todos nosotros hemos sido entrenados a través de la educación y el entorno a perseguir el logro personal y la seguridad, y a luchar por nosotros mismos. Aunque lo disimulemos con eufemismos, hemos sido educados para las diversas profesiones dentro de un sistema basado en la explotación y el miedo codicioso. Tal entrenamiento tiene inevitablemente que traer confusión y miseria a nosotros y al mundo, porque crea en cada individuo barreras psicológicas que le separan y le mantienen aislado de los demás.
La educación no consiste en un mero instruir la mente. La instrucción contribuye a la eficiencia, pero no genera integración. Una mente educada de esta manera es continuación del pasado; una mente así nunca podrá descubrir lo nuevo. Por esa razón, para averiguar en qué consiste la verdadera educación, tenemos que investigar el sentido global de la vida.
Para la mayoría de nosotros el significado de la vida en su totalidad no es de primordial importancia, y nuestra educación subraya los valores secundarios, haciéndonos meramente expertos en alguna rama del saber. Aunque el saber y la eficiencia son necesarios, el recalcarlos demasiado sólo nos lleva al conflicto y a la confusión.
Ambición vs. Amor
Hay una eficiencia inspirada por el amor, que va mucho más lejos y es mucho más grande que la eficiencia inspirada por la ambición: y sin amor, que es lo que nos da una comprensión integral de la vida, la eficiencia sólo engendra crueldad. ¿No es esto lo que está sucediendo actualmente en todas partes del mundo? Nuestra educación actual está al servicio de la industrialización y de la guerra, siendo su meta principal desarrollar la eficacia; y nosotros estamos atrapados en esta maquinaria de competición despiadada y de mutua destrucción. Si la educación nos ha de llevar a la guerra, si nos enseña a destruir o a ser destruidos, ¿no ha fracasado totalmente?
Para instaurar la verdadera educación, debemos evidentemente comprender el significado de la vida en su totalidad, y para ello tenemos que adquirir la capacidad de pensar con rectitud y veracidad, en vez de seguir una línea de pensamiento. Un pensador “consecuente” es una persona que no reflexiona, porque se adapta a un patrón. Repite frases y piensa rutinariamente dentro de un surco. La existencia no la podemos comprender de un modo abstracto o teórico. Comprender la vida es comprendernos a nosotros mismos y esto es a la vez el principio y el fin de la educación.
Información e Inteligencia
La educación no es la simple adquisición de conocimientos, ni coleccionar y correlacionar datos, sino ver el significado de la vida como un todo. Pero el todo no se puede entender desde una parte, que es lo que intentan hacer los gobiernos, las religiones organizadas y los partidos autoritarios.
La función de la educación es crear seres humanos íntegros y por lo tanto, inteligentes. Podemos adquirir títulos y ser eficientes en el aspecto mecánico, sin ser inteligentes. La inteligencia no es mera información; no deriva de los libros, ni es la capacidad de reaccionar hábilmente en defensa propia o hacer afirmaciones agresivas. Alguien que no haya estudiado puede ser más inteligente que un erudito. Medimos la inteligencia en términos de títulos y exámenes y hemos desarrollado mentes astutas que esquivan los problemas humanos vitales. La inteligencia es la capacidad para percibir lo esencial, lo que es. Y despertar esta capacidad en uno mismo y en los demás, es educación.
La educación debe ayudarnos a descubrir valores permanentes para que no nos conformemos con meras fórmulas y frases hechas. La educación nos debe ayudar a demoler las barreras sociales y nacionales en lugar de reforzarlas, porque éstas crean antagonismo entre los hombres. Desgraciadamente el actual sistema educativo nos vuelve seres serviles, mecánicos y profundamente irreflexivos. Aunque nos despierta el intelecto, interiormente nos deja incompletos, idiotizados e incapaces de crear.
Sin una comprensión integral de la vida, nuestros problemas individuales y colectivos crecen y se agudizan en todos los sentidos. El objetivo de la educación no es sólo producir simples eruditos, técnicos y buscadores de empleos, sino hombres y mujeres íntegros y libres de temor, porque sólo entre tales seres humanos puede haber paz duradera.
Es en la comprensión de nosotros mismos que el temor se disipa. Si el individuo ha de enfrentarse a la vida de instante en instante, con a sus complejidades, miserias y exigencias repentinas, tiene que ser infinitamente flexible, y por lo tanto, estar libre de teorías y de particulares patrones de pensamiento.
La educación no debe estimular al individuo ni a amoldarse a la sociedad, ni a estar en desarmonía con ella, sino que debe ayudarlo a descubrir los verdaderos valores que surgen como resultado de la investigación imparcial, y de tomar conciencia de uno mismo. Cuando no hay conocimiento propio, la autoexpresión se convierte en autoafirmación, con todos sus conflictos ambiciosos y agresivos. La educación debe despertar en el individuo la capacidad de darse cuenta de sí mismo, y no simplemente entregarse a la complacencia de la autoexpresión.
¿De qué sirve instruirse si en el proceso de vivir nos estamos destruyendo? Ante la serie de guerras devastadoras que hemos sufrido una tras otra, tenemos que llegar a la conclusión obvia de que hay algo radicalmente erróneo en la educación de nuestros hijos. Creo que la mayor parte de nosotros nos damos cuenta de esto, pero no sabemos cómo afrontar el problema.
Los sistemas, ya sean educativos o políticos, no se cambian misteriosamente: se transforman cuando hay un cambio fundamental en nosotros. El individuo es de primordial importancia, no el sistema. Y mientras el individuo no comprenda el proceso total de sí mismo, no hay sistema, ni de derecha ni de izquierda, que pueda traer orden y paz al mundo.
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Texto del libro La Educación y el Significado de la Vida, cap. I. Edaf.